“Catastrofía”, es el segundo largaduración del grupo de Totana
(Murcia) Inkeys, formado por cinco
chicos que llevan dándole traca al mundo de la música desde 2004, un disco
lleno de reminiscencias pop, rock con cierto airecillo electrónico que hacen
que "Catastrofía" sea algo curiosamente atrayente desde el minuto uno
de la primera canción.
Tras autoeditar su primer Lp “"XI razones para perder el
sueño" no podrían haber creado mejor continuación que este “Catastrofía”
producido por ellos mismos y masterizado por Pepe Ludeña en Loopers Estudio, un
disco donde se dan cita las melodías de lo más variado. Pese a tener como
etiqueta ser el segundo "en la familia" de Inkeys se
desenvuelve como pez en el agua y no se queda con ser una mera continuación. Es
una exploración introspectiva de la esencia misma del grupo. Nos cuentan sus
sentimientos, vivencias, decepciones y frustraciones, una obra digna de
cualquier alma sensible.
Cargado con once temas sensacionales “Catastrofía” te puede transportar
al espacio con su apertura el combo de "Intro + Quemassangres" es sencillamente magistral. “Don't turn
back”, donde el predominio de los acordes de guitarra puede hacerte recordar a
los mismísimos Pearl Jam. “Golpes en el agua” podría estar firmado por
cualquiera de los Teenage Fanclub, para llevarnos un poco después a su lado más
pop con “Do the same” un tema muy setentero que personalmente me recuerda
-llamadme loca- a los Beatles.
En el ecuador del disco nos encontramos con "No tengo el
control" a mi gusto, una de las mejores del disco, junto con la numero
dos. Tiene las dosis exactas de guitarras, armonías, arreglos y teclados. ¡Me
encanta!
En este “Catastrofía” hay también lugar para el romanticismo con “Todo
irá bien”, un medio-tiempo rockero donde las lineas voz se acercan por momentos a los Sidonie más
melancólicos. Destaco además el siguiente corte. El octavo: “Lula” donde nos
encontramos con una sorpresa, un acierto con tintes a lo Neil Young. Inkeys son
capaces de crear temas tan perfectos como “Puntas de cristal, polvo de sal” ,un
corte al más puro estilo pop rock o “Eleven Girl” con claras influencias de los
british '90 con tono enérgico y alegre que al igual que me pasaba con el octavo
corte, nos cierran el disco con "3 de febrero" con otra sorpresa en
forma de tema folk. Tema acústico con un violín proverbial, con voz rasgada nos
dicen adiós, por ahora. Porque estoy segura de que vais a poner este disco mas
de una vez.
En definitiva Inkeys han creado lo que para mi es un disco de
los que no se suelen disfrutar a menudo, un trabajo lleno de influencias,
rabia, melancolía y buen hacer de un grupo que va a dar mucho de qué hablar. Y
tú ¿a qué esperas para escucharlos?
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